Hondonadas
Condenso vendavales en mi anémico respiro
Cuyo ritmo bien parece un escuadrón de olas
Que desnudan su inequívoca muerte.
Me hago eco de pronósticos extraños
Y al observar las nubes de tristeza estacionaria,
Compruebo que no resta alternativa,
La flecha es una sola
Y la llevo atravesada desde siempre.
Qué decir, sino mirar
Y aventarme por los corredores
Que me traen de regreso.
Algo debo hacer con la guitarra que perdí.
Quizá quiera evocar aquellos memorables estribillos
De tonadas dolorosas.
Talvez condecorar ensoñaciones
Enclavadas bajo un mitin de tropiezos.
Digo que deje de ser aficionado a la nostalgia.
Soy un espécimen custodiado,
Aguardando la visita de minúsculos espectros;
Por lo tanto, mi garganta es una atroz caverna
Con su propio vía crucis.
Condenso vendavales en mi anémico respiro
Cuyo ritmo bien parece un escuadrón de olas
Que desnudan su inequívoca muerte.
Me hago eco de pronósticos extraños
Y al observar las nubes de tristeza estacionaria,
Compruebo que no resta alternativa,
La flecha es una sola
Y la llevo atravesada desde siempre.
Qué decir, sino mirar
Y aventarme por los corredores
Que me traen de regreso.
Algo debo hacer con la guitarra que perdí.
Quizá quiera evocar aquellos memorables estribillos
De tonadas dolorosas.
Talvez condecorar ensoñaciones
Enclavadas bajo un mitin de tropiezos.
Digo que deje de ser aficionado a la nostalgia.
Soy un espécimen custodiado,
Aguardando la visita de minúsculos espectros;
Por lo tanto, mi garganta es una atroz caverna
Con su propio vía crucis.
Aquella casa.. hoy inexistente, se hallaba ubicada en la calle Bueras, de la ciudad de Rancagua, Chile. Al momento de registrar la imagen, los obreros estaban en plena faena de eliminación de la fachada, que a esas alturas, era lo único que restaba de tan maravillosa construcción.
La bofetada del derrumbe golpea casas y remece recuerdos, imágenes, diálogos, amores y desventuras que alojaron en su interior junto con sus habitantes.
La foto corresponde a Abril 2008 y aquel día, en el cual debía realizar una visita a un sector cercano, me había propuesto fotografiar la casa. Luego de mi diligencia - que palabra más antigua, pero que adecuada para el caso -, me dirigí a obtener mi ansiada imagen, pues admiraba la belleza de la construcción. Al asomarme a la cuadra, pude ver que aquel inmueble respiraría por muy poco tiempo. Apremiado y sentido, tomé mi cámara y disparé el obturador tres veces.
Me pregunto ahora... ¿Habrá sido la casualidad que me llevó ese día a realizar un trámite con empecinamiento, aun cuando podía efectuarlo otro día....? o ¿alguna otra fuerza que desconozco, golpeó las puertas de mi inconsciente, para invitarme a pasear por ahí?
Quiero compartir mis dudas con ustedes.
8 comentarios:
emmm lo mas probable es que esa casa tenia algo que te hacia recordar algo del pasado y quizas algun momento en especial.
me pasa bien a menudo pero no antes de que algo sea demolido jajaja
holaaaa..aca me estoy pasando para dejar mis saludos e invitarte a vicitar mi blog.para enceñarme o criticarme ja!
saludos..
hola, he llegado a tu blog a través de Mica y me he sentido muy identificada con esta entrada. En mi ciudad también están "destruyendo" varias casas antíguas, con siglos a sus espaldas... y a su alrededor siempre hay una especie de halo de tristeza... y yo siempre me pregunto que secretos guardarán sus muros, como habrán sido las vidas que han transcurrido en sus espacios...
Un amigo me dijo una vez que no existen las casualidades sino las causalidades. Si ésto es cierto, tenías que regresar a la casa para poder fotografiarla antes de su derrumbe absoluto. Quizá para mantener viva su "alma" a través de tu objetivo.
Un beso
Hola Roberto, la canción que me has comentado de Alberto Córtez, no será "si no te tengo a ti"?. He buscado "a ti" y no he encontrado nada, sólo la que te digo aquí. No la conocía y leyendo su letra, coincido contigo, es realmente hermosa.
Por si no es la misma canción, te dejo la letra de "Si no te tengo a ti", aunque imagino que ya la conocerás:
SI NO TE TENGO A TI
Porque te di lo poco que tenía,
el gozo y el dolor de nuestra cama
y un breve y resumido calendario
de penas y traiciones consumadas.
Te di mi amor, amor a manos llenas.
Te di mi rebeldía y mi esperanza
y porque no dijeras que era mía,
con el último adiós, te di mi alma.
Si no te tengo a ti.
Si no te tengo a ti.
Si no te tengo a ti,
no tengo nada.
Todo lo tienes tú, todo lo tienes.
Mi voz y mi canción desesperada.
Para ti fueron todos los recuerdos
de una vida en común, que aún me quedaban.
Porque te di, mi amor, la vida entera,
mi agonía te doy, puedes tomarla.
Tuya es la muerte, amor, que me persigue.
Fuera de eso, ya ves, no tengo nada.
Si no te tengo a ti.
Si no te tengo a ti.
Si no te tengo a ti,
no tengo nada.
Un beso
Te enlazado desde mi blog, espero que no te moleste.
Un beso
derrepente hay lugares, cosas, situaciones que nos hacen recordar eventos que ni siquiera nosotros sabemos de donde vienen, quiza de otrs vidas quiza de la nada, sin embargo seguir los instintos y encontrar efectos inesperados es signo de que hubo alguna relacion
buena la foto, no recuerdo bien pero debo haberla visto algun dia.
saludos
derrepente hay lugares, cosas, situaciones que nos hacen recordar eventos que ni siquiera nosotros sabemos de donde vienen, quiza de otrs vidas quiza de la nada, sin embargo seguir los instintos y encontrar efectos inesperados es signo de que hubo alguna relacion
buena la foto, no recuerdo bien pero debo haberla visto algun dia.
saludos
Yo creo que ya era tu destino (o tu casualidad) fotografiar esa casa
Saludos!
p.d. Me gustó "Hondonadas" =)
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